El racismo continúa presente en el fútbol. El último episodio tuvo lugar durante el partido de clasificación para la Eurocopa 2020 entre las selecciones de Rumanía y Suecia. El partido fue interrumpido cuando parte del público local empezó a abuchear y proferir gritos racistas hacia el jugador de origen eritreo Alexander Isak.
Por ello, y a invitación de la Real Sociedad , se decidió desplegar una pancarta en las gradas de Anoeta antes del partido con el mensaje: #StopRacismo. «En repulsa a lo acontecido hace dos semanas en Rumanía con Alex Isak, y con la firme convicción por crear una sociedad más sana, respetuosa y con los valores acordes a nuestro tiempo».
Una acción en la que participaron voluntarios y voluntarias de SOS Racismo Gipuzkoa – SOS Arrazakeria Gipuzkoa» y que finalizó con el aplauso unánime de las más de 28.000 personas que se dieron cita en el estadio y un comunicado en el que señaló que «En una sociedad cada vez más plural y en un mundo del deporte cada vez más universal e inclusivo no caben actitudes propias de tiempos pasados. Hagamos un mundo mejor entre todos«.
