Comunicado conjunto de SOS Racismo Madrid, Karibu, Pueblos Unidos, Coordinadora de Barrios Madrid
CIE: vulneraciones de derechos, espacios racistas
En los últimos días, el magistrado del Juzgado de Instrucción nº 6 en funciones de Control del CIE de Aluche, Ramiro García de Dios, un referente en la defensa de la dignidad de las personas que sufren el internamiento en CIE, ha emitido una serie de Autos y Providencias como resultado de sus visitas al Centro los días 27 de diciembre 2017 y 13 de enero 2018 así como de las quejas de las personas internas y de las ONG.
Llueve sobre mojado. No es la primera vez que los magistrados instan a la Dirección del CIE a que cumpla las resoluciones judiciales emitidas anteriormente respecto a cuestiones tan importantes como la tramitación de las solicitudes de asilo, la correcta identificación de los agentes de policía o las deficientes condiciones de climatización y alimentación del Centro.
Así, ante la reiteración de quejas de no tramitación de las solicitudes de asilo en el CIE de Madrid, el Juez ha requerido al Director del centro, una vez más, a que dé cumplimiento estricto a lo acordado en la resolución del 3 de octubre 2016, por la que se ordenaba la organización de un sistema de registro de las solicitudes en horario de 9h a 14h todos los días hábiles en un lugar concreto del CIE, con personal suficiente para que las personas internas puedan entregar en mano su solicitud de asilo y recibir, en ese momento, copia sellada de los documentos que presenten. A día de hoy el único sistema para solicitar asilo sigue siendo depositar la solicitud en un buzón que solo se abre una vez al día, sin recibir copia sellada de la misma en ese momento. Cabe recordar que en el CIE se encuentran personas que necesitan protección internacional, pero las barreras existentes para ejercer dicho derecho imposibilitan, por la vía de los hechos, el ejercicio del mismo, incumpliendo de este modo la legislación internacional y generando situaciones de mucha vulnerabilidad. Las organizaciones que realizamos labores de acompañamiento a las personas encerradas en el CIE de Aluche llevamos años denunciando las barreras existentes en el acceso al ejercicio de derechos y consideramos que en una situación de estrés extremo como es la privación de libertad y la posibilidad de sufrir una deportación, los derechos deben ser informados con rigor, con cuidado y se debe, no solo garantizar, sino facilitar el acceso a los mismos. El mecanismo de un buzón que se abre una vez al día resulta un procedimiento poco riguroso para el ejercicio de un derecho tan serio e importante como el de la Protección Internacional.
Asimismo, el magistrado destaca el incumplimiento de lo dispuesto en el artículo 49.3 del Reglamento de Funcionamiento y Régimen Interior de los CIE, en lo que se refiere a la obligatoriedad de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía de portar una placa en lugar visible con su número de identificación profesional. En su Auto de fecha 8 de enero 2018, el Juez señala que “no es una cuestión menor, puesto que la falta de identificación permite la impunidad denunciada en diversas ocasiones por personas internadas, cuando los Agentes de Policía se extralimitan verbalmente o utilizando la fuerza ilegítima contra las personas internadas, lo que se traduce en la imposibilidad, que parece buscada, de identificar a los Agentes que se extralimitan verbal o físicamente con las personas internadas”.
Desde el punto de vista de los derechos básicos que afectan a la dignidad de las personas, la situación permanece estancada. En su visita de 27 de diciembre 2017, el magistrado pudo comprobar que tanto en los dormitorios como en la sala de estar el “frío reinante era intenso”. Efectivamente, como viene ocurriendo todos los inviernos, gran número de personas internadas se quejan de la escasa ropa de abrigo que proporciona el Centro para combatir el frío producido por las bajas temperaturas y la baja intensidad de la calefacción. Además, en el trascurso de la visita, el Juez comprobó y probó la comida servida a los internos, observando que “tanto el primer como el segundo plato se caracterizaban por su escasez de contenido”. Todo ello corrobora las reiteradas quejas de las personas internas a lo largo de los años en lo que respecta a las deficiencias en el sistema de calefacción, la escasez de ropa de abrigo y la insuficiencia y mala calidad de la alimentación.
No quedan ahí las quejas de las personas internas. Durante la visita del día 13 de enero 2018, mostraron a Su Señoría una rata de grandes dimensiones muerta, situada en el techo de rejilla de la sala de ocio. De ningún modo podemos considerar este hecho como una simple anécdota. La vertiginosa capacidad reproductiva de estos roedores puede provocar problemas serios para la salud, y demuestra que algo falla en el servicio de desratización y desinsectación del Centro. Cabe recordar las plagas de chinches reiteradas que han conllevado el cierre temporal del CIE de Zapadores en Valencia.
Todo esto pone de manifiesto que la problemática de los CIE no sólo son sus instalaciones ni la ausencia de una regulación más extensa que evite prácticas arbitrarias, sino su amparo por la existencia de una Ley de Extranjería profundamente inhumana que objetiviza a las personas migrantes y las reduce a números de personas que sufren la criminalización, encierro y expulsión.
Las organizaciones de Derechos Humanos apostamos por mantener una presencia constante en el CIE de Madrid. Es esta tarea la que nos permite denunciar, una vez más, que la legalidad vigente se incumple de forma reiterada en los CIE, condenando a la población migrante a vulneraciones de derechos constantes, además de someterla a la privación de libertad y a los procesos de expulsión que rompen sus historias de vida y dañan su dignidad. Las organizaciones Pueblos Unidos, SOS Racismo, Coordinadora de Barrios y Karibu reiteramos la importancia de un compromiso político que desemboque en el cierre de los CIE y el fin de las deportaciones.